jueves, 4 de junio de 2009

Noticia 4 de junio de 2009

EL SENADO ANALIZA LA SITUACIÓN DE LA ENFERMERÍA BRITÁNICA Y SU PRESCRIPCIÓN
ENFERMERA

Entrevista con el representante del Royal Colleg of Nursing que ha
participado en la ponencia de recursos humanos del Senado.

La "ponencia de estudio de las necesidades de recursos humanos en el Sistema Nacional de Salud", constituida en el seno de la Comisión de Sanidad y Consumo ha contado con la comparecencia de un representante del Royal College of Nursing del Reino Unido, Alan Dobson, para analizar la situación de la enfermería británica que, en multitud de ocasiones, ha sido puesta como ejemplo a seguir en nuestro país, como es el caso de la prescripción enfermera. Al hilo de esta intervención, DIARIO ENFERMERO ha tenido la ocasión de entrevistar a este experto enfermero que ha trabajado durante más de 20 años en la marina británica (Royal Navy). Especialista en cuidados
críticos y urgencias ha trabajado en distintos departamentos sanitarios, como tutor y como asesor, en el sur del país y en Londres. Actualmente es asesor especializado del Royal College of Nursing en cuidados críticos y urgencias.

El Royal College es el principal sindicato de enfermería en el Reino Unido. Representa, según los datos facilitados por Alan Dobson, a 400.000 de las más de 650.000 enfermeras británicas colegiadas. Su papel consiste en representar a la profesión y promover las buenas prácticas en enfermería. Se trata de una organización que dispone de sedes en las nueve regiones de Inglaterra, así como con oficinas nacionales en Escocia, Gales e Irlanda del Norte. También cuenta con más de 40 foros de enfermería especializada.
Invitado a participar en la ponencia de estudio de las necesidades de recursos humanos del Senado, Alan Dobson analizó en profundidad la diferencia entre las enfermeras generalistas y las enfermeras de práctica avanzada en el Reino Unido, con sus diferentes capacidades y competencias. La prescripción enfermera o la distribución de los recursos humanos y la proporción de médicos enfermeros fueron también aspectos destacados de su intervención.

Práctica avanzada
Lo que en Gran Bretaña se denomina "enfermera de práctica avanzada" sería el equivalente a la enfermera especializada de nuestro país. Estas enfermeras tienen mayores competencias y una base de conocimientos superior, pues tras un tiempo de actividad clínica, los profesionales realizan un periodo formativo, a nivel de máster, cuya duración depende fundamentalmente del ámbito de la práctica, aunque en ningún caso es superior a dos años. Tras esta formación, las enfermeras son sometidas a una evaluación previa para comprobar su competencia. Según explicaba Alan Dobson" se trata de un sistema de formación y capacitación formal, seguido de un sistema de supervisión clínica por parte de expertos. Entre estos peritos hay expertos en enfermería, en medicina y del ámbito académico".

Una vez que la enfermera de práctica avanzada supera este proceso de capacitación "puede llevar a cabo tareas de investigación, con la posibilidad de efectuar diagnósticos, encargar pruebas diagnósticas, tales como radiografías o análisis clínicos, y prescribir tratamientos farmacológicos",
siempre en el ámbito de su competencia. Sin embargo, se trata de un proceso muy activo, pues "las enfermeras están bajo supervisión clínica permanente y se recertifica su competencia profesional cada uno o dos años".

Para Alan Dobson uno de los ejemplos más claros de las más de 30 especialidades enfermeras que están reconocidas en el Reino Unido son las unidades de cirugía menor en urgencias, "que están gestionadas y dirigidas de forma independiente por parte de las enfermeras". En estas unidades las
enfermeras son las que se encargan de recibir a los pacientes, evaluarlos, encargar las pruebas diagnósticas necesarias, ya sea radiografías o análisis clínicos, interpretarlas, y tratar a los pacientes hasta su curación con la correspondiente prescripción farmacológica. En estas unidades se encargan de todo tipo de suturas, heridas, reducción de fracturas¿

Prescripción enfermera
En pleno debate para la legalización definitiva de la prescripción enfermera en nuestro país, el Senado pudo conocer de primera mano cómo ha sido el proceso de implantación en el Reino Unido, donde actualmente "son miles las enfermeras que pueden prescribir de forma independiente en todos los ámbitos". También pueden hacerlo la mayor parte de las enfermeras españolas
que trabajan en Gran Bretaña.

Al igual que en nuestro país, la postura inicial de los médicos fue de cierta resistencia y escepticismo, algo que, hoy en día, ha desaparecido por completo. Para Dobson "la clave para el éxito del proceso ha sido la evolución que se ha seguido. Se trataba de que los médicos vieran la situación como algo que complementaba su función, sin que hubiera ningún tipo de competencia entre médicos y enfermeras, donde lo primordial en todo momento era la seguridad del paciente. Una vez asegurada se han superado todo tipo de barreras". Para los pacientes, que han podido optar qué profesional querían que les tratara, también ha sido todo un éxito, pues antes de la implantación de la prescripción enfermera "era muy frustrante que en las consultas de enfermería, o en las visitas domiciliarias, después de que la enfermera realizaba todo el seguimiento del paciente, al final tenían que recurrir al médico para que firmase su receta".

Por este motivo, para Alan Dobson la experiencia, que en Gran Bretaña ha sido "extremadamente positiva especialmente en la continuidad de cuidados que se prestan a los pacientes", también sería muy beneficiosa en nuestro país. No en vano, "en España ya hay muchas enfermeras que, por su experiencia profesional, están plenamente capacitadas para hacer el diagnóstico previo a cualquier prescripción, por lo tanto, simplemente se consolidará la situación y se ampliarán sus funciones". Eso sí, también habría que tener en cuenta que si en España ya hay escasez de enfermeras, a la hora de ampliar sus funciones, habría que ir cubriendo los huecos que irán dejando.