viernes, 2 de diciembre de 2011

El Hospital de Poniente 'inspira' el protocolo andaluz contra el maltrato

El protocolo interno que el Hospital de Poniente elaboró, de forma pionera, en junio de 2010 sobre la atención en casos de violencia de género, y su posterior inclusión en la práctica avanzada de enfermería, ha supuesto que la Consejería de Salud tenga muy en cuenta ese documento para la elaboración de un protocolo similar, de ámbito autonómico, que se publicará en próximas semanas.

El gestor de cuidados del Hospital de Poniente, José Carlos Fernández Ayala, explicó a IDEAL que el protocolo del centro ejidense nació a raíz de una reflexión sobre cómo se estaba trabajando en el área de Urgencias la detección de casos de violencia doméstica y cómo se abordaban posteriormente. Había dos situaciones: en las que la mujer lo decía abiertamente y otras en las que los sanitarios simplemente tenían sospecha. Además, no siempre todos los trabajadores tenían claro cómo coordinarse con otros agentes como trabajadores sociales o policía.

Por ello, según explica José Carlos Fernández, se inició un análisis de todas las unidades implicadas del hospital y, tras varias reuniones, se cerró el protocolo interno en junio del pasado año. Este documento establecía un nuevo circuito y una mejor coordinación entre unidades. Además, según el gestor de cuidados, se mejoró la coordinación con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y con médicos forenses, quienes fueron incluidos en las últimas reuniones para cerrar el protocolo.

José Carlos Fernández explica que este nuevo sistema se marcó como objetivos primordiales realizar una valoración adecuada de la persona, ofreciendo nociones sobre como llevar la entrevista (especialmente en los casos de sospecha) con el fin de realizar una rápida atención, asegurando la seguridad de la persona y garantizando su intimidad.

La implantación de este nuevo protocolo supuso la formación de gran parte del personal, con especial hincapié en el del área de Urgencias, y además ampliar el proceso a los enfermeros de la sala de triaje (la primera a la que acude un paciente en urgencias). De esta forma, gracias a la participación también pionera del Hospital de Poniente en la práctica avanzada de enfermería, el profesional de la sala de triaje ya saben distinguir con claridad los casos de violencia de género para incluirlos en un circuito específico diferente al del resto de pacientes.

Como consecuencia de todos estos cambios, «ahora todo el mundo tiene claro lo que tiene que hacer», señala José Carlos Fernández. Actualmente, con este nuevo sistema, al alta de la enferma se le ofrece siempre una documentación en la que puede acceder a teléfonos o lugares en los que pedir ayuda y, en caso de que haya dado su consentimiento, el caso se deriva a las trabajadoras sociales. Gracias a este sistema, en el primer semestre de este año han podido identificar 24 casos de maltrato doméstico.

Ahora, Juan Carlos Fernández se prepara para participar en el proceso formativo que acompañará la publicación del nuevo protocolo andaluz sobre atención sanitaria ante violencia de género ya que acudirá a varios hospitales para enseñar a otros lo que ya, de alguna forma, hace más de un año que se practica en el Hospital de Poniente.

Además, el centro hospitalario de El Ejido y otros dos más de ámbito andaluz han colaborado en la redacción del protocolo andaluz que quedó listo hace un par de meses y que, previsiblemente, se publicará antes de que finalice este año 2011.