miércoles, 28 de diciembre de 2011

Las esperas en las Urgencias llegan a las 20 horas en el Macarena

Las esperas para una atención en Urgencias alcanzaron las 20 horas la madrugada del martes 13 de diciembre en el Hospital Macarena, una demora excesiva que supuso una importante merma en la calidad asistencial y sobrecarga en el personal sanitario. El sindicato de Enfermería Satse denuncia que esta situación está motivada por el cierre de alrededor de un centenar de camas de hospitalización, lo que provocó, justo después del macropuente, el colapso en las Urgencias. Los pacientes tuvieron que soportar demoras de entre cuatro y 20 horas para conseguir un diagnóstico y un tratamiento a los problemas de salud.

El centro hospitalario, por su parte, negó ayer cierre de camas y explicó que hay puestos asistenciales libres porque no hay enfermos. Fuentes del Macarena añadieron que se registró cierta demora en las Urgencias motivada por una adaptación del sistema informática Diraya para la asignación de las camas. Frente a esta explicación del Hospital Universitario, el sindicato Satse, mayoritario en el SAS, insistió en que gran parte de las alas de hospitalización que se cerraron en verano para la ejecución de reformas sólo están operativas, en diciembre, de manera parcial. Así, por ejemplo, la planta de Oncohematología (8D), que dispone de 21 camas, sólo tiene abiertas la mitad; y en Neurología (7C), donde hay 27 camas, también están funcionando sólo la mitad. Esta situación se repite en Cirugía Cardiovascular. Otra de las áreas más sensibles es Pediatría, donde las 23 camas de lactantes se suelen cerrar durante los fines de semana, lo que también genera una importante presión en la asistencia a los más pequeños.

La central de los enfermeros advierte que este cierre de camas "está afectando especialmente a las Urgencias, que están soportando una presión asistencial innecesaria y evitable provocada por la demora tanto en el ingreso del enfermo como en la administración del tratamiento". En este sentido, el Satse dice que se está poniendo "en peligro la seguridad clínica del enfermo generando además al personal que desempeña su labor en dicha área una sobrecarga de trabajo que pone en peligro la calidad de cuidados". Este problema también se registra en el Hospital San Lázaro, que pertenece al área del Macarena, donde 14 camas están cerradas en la 5D y otras 24 en la primera norte, que deberían abrirse cuando aumenta la presión asistencial.